EN
UNA NOCHE DE HALLOWEEN.
Un
pizzero va hacia una casa. Todos decían que esa casa era rara y siniestra. El
pizzero no lo sabía porque le habían dado una beca de estudio en Los ángeles.
El pizzero llama a la casa, después de
las 1:30 vuelve a llamar y le abre alguien, aunque nadie había detrás de la
puerta.
Entra en la casa, deja la pizza en una
mesa, coge una linterna e inspecciona toda la casa. Mira en todas las
habitaciones menos en una. Entra sigilosamente en la habitación y ve una mujer
clavada en el techo, muerta y desangrada.
Llama a emergencias y a la policía, pero
no responden. Sale de la casa corriendo, ve unas luces, se esconde detrás de un
arbusto. Son emergencias y la policía, pero no son humanos sino fantasmas. Va
corriendo hacia atrás hasta que se cae por un barranco y se da un golpe en la
cabeza.
Se
despierta y se da cuenta de que era un sueño. Entonces se va a tomar una aspirina
y un paracetamol, pero misteriosamente muere por esas dos aspirinas.
Autor:
Álvaro Gil Martín Curso:
5º C